Así lo relataron fuentes oficiales, que explicaron que el mandatario espera que en breve se retrotraiga la situación a como estaba previo al aumento del 30%; Martín Menem confirmó la decisión presidencial
En Casa Rosada afirmaron este jueves que el presidente Javier Milei se puso furioso cuando se enteró del aumento en los sueldos de diputados y senadores que se conoció en las últimas horas. “Está recaliente”, fue la frase con la que fuentes de Balcarce 50 graficaron el ánimo presidencial tras enterarse de la decisión del aumento del casi 30% en las dietas de los legisladores que, aseguraban, él mismo había dado la orden de retrotraer tanto al titular de la Cámara baja, Martín Menem, como a la vicepresidenta Victoria Villarruel, titular del Senado, apenas se enteró del tema.
Sobre el final de esta tarde el propio Menem usó su cuenta de la red social X para consignar: “Por orden del Presidente Javier Milei vamos a presentar un proyecto para retrotraer el aumento que fue otorgado a diputados y senadores de la Nación de manera automática, debido a la resolución 0013/11 firmada por el ex-presidente del Senado Amado Boudou y el ex-presidente de la Cámara de Diputados Julián Domínguez en el año 2011″. Y completó: “Los diputados y senadores de la Nación bajo ningún punto de vista deben quedar ajenos a realizar el sacrificio que está realizando el pueblo argentino para salir de la crisis”.
El mensaje llegó pocos minutos después de que Menem dejara la Casa Rosada en la que estuvo reunido junto al ministro Guillermo Francos; el titular del bloque de diputados de Pro, Cristian Ritondo; el de la UCR, Rodrigo de Loredo y el asesor presidencial Santiago Caputo, todo en vistas a la reunión de mañana con los gobernadores.
Voces del oficialismo resaltaron que para el presidente Milei, que “tiene a la bandera de la austeridad como una prioridad”, es fundamental el rechazo a lo que considera los privilegios de la clase política. “La casta”, como él mismo la define. Por lo que no dudaban en afirmar que la medida tomada en el Parlamento era considerada internamente como “intolerable”, lo que se exacerbaba aún más en meses que en el oficialismo saben que son “muy duros” para un enorme conjunto de la sociedad, que sufre los ajustes económicos.
“Le decimos a la gente que aguante los meses difíciles y los legisladores se suben el sueldo, es un despropósito”, sintetizó una fuente oficial, tras lo que recalcó que inmediatamente después de que supo lo sucedido, el Presidente buscó explicaciones en sus alfiles en el Parlamento y ordenó revertir la decisión.
En ese sentido, en el correr de la tarde ya se hablaba en Casa Rosada de la posibilidad de mandar un proyecto de ley “con el respaldo de Martín Menem y Diego Santilli para retrotraer el aumento”. Algo que también planteó el diputado de La Libertad Avanza (LLA) Carlos González D´ Alessandro, que a través de su cuenta de la red social X manifestó que junto al titular de la Cámara baja estaban “de acuerdo en que hay que retrotraer el aumento que recibimos Diputados y Senadores. Consensuamos presentar un proyecto para dar marcha atrás dicho aumento. Esperamos que la Cámara de Senadores, el Poder Ejecutivo, y el Poder Judicial se sumen a esta iniciativa”.
El mensaje, que buscó sumar a los otros dos poderes del Estado, fue compartido en su propia cuenta por Menem. A diferencia de él quien se mantuvo en silencio público fue su par del Senado, Villarroel.
La paritaria de los trabajadores del Congreso de la Nación marcó que el incremento salarial acumulativo para el primer bimestre del año fue de 16% a partir del 1° de enero de 2024 y 12% desde el 1° de febrero. La decisión tomada el último 23 de febrero establecía que era para el personal del Palacio Legislativo pero no hacía referencia a los legisladores, que tienen sus dietas atadas a esa negociación. Sin embargo en las últimas horas fue que se conoció la suba para los diputados y senadores, lo que encendió la polémica.
Rápidamente el mandatario dio la orden y a cuadras de la sede de Gobierno se puso en marcha el operativo para dar vuelta la medida. La decisión de que sea a través de una ley encierra la posibilidad de que todos los legisladores deban votarla y eventualmente queden expuestos quienes no lo hagan.
